Las maquinaciones del poder son posibles cuando se las sirven en bandeja, si la unión no se funda en una comunidad de principios , objetivos y fines esta destinada a romperse.
Quien acuñó la divisa “la union fait la force” lo tenía muy en claro siglos ha, ¿tan poco hemos aprendido o tanto hemos olvidado?
Valen más dos unidos que una multitud de rejuntados. Frentes y uniones dan testimonio de lo dicho. Pactos tratados y alianzas son recursos políticos para comprar tiempo hasta que se pueda romperlos.
Dicen y es cierto que los pueblos que ignoran la historia están condenados a repetirla.
De nada vale negar la evidencia o pretender tapar con pintura las rajaduras, que serán grietas anticipo del derrumbe.
El maquillaje les puede servir a añosas señoras con veleidades de jovencitas en edad de merecer o a funcionarias expuestas, para disimular el rictus de histeria. No es propio de dirigentes responsables con una tremenda carga sobre los hombros.
Desde el comienzo los Judas fueron muy visibles para los que sólo saben lo que se publica y deducen o lo miran por TV, sin estar intoxicados por miles de informaciones reservadas, dimes y diretes; se miente con palabras, dichas o escritas, gestos, miradas, actitudes los ponen en evidencia, lo saben todos.
En diez años de sitio y cientos de asaltos los griegos no pudieron conseguir lo que obtuvo el legendario Caballo de Troya en una noche.
¿Que es lo que puede quebrarse y caer? Afortunadamente solo un sello de goma.
Se especula que el gobierno puede alcanzar su objetivo de dividir, en verdad solo habrá matado un fantasma, como el delirante Quijote arremete contra molinos de viento.
Dejó de ser solo un problema agropecuario para ser una cuestión de todos, no se llama retenciones sino financiamiento de la destrucción del país, para perpetuarse. Un país ingobernable. Pérdida de mercados, destrucción de la producción agropecuaria, de la justicia, el derecho, la educación y las instituciones, colapso energético, endeudamiento creciente
¿Tienen otro nombre?
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