TIEMPOS MALOS ACA Y ALLA O LE MIENTO

Las comparaciones son odiosas pero a veces necesarias cuando manejamos valores relativos: esto es muy malo, se dice y queda tácito con respecto a qué. ¿Al pasado, a las ilusiones, a lo que le ocurre al vecino?
Que nuestra actualidad es un asco no hay duda, pero miremos que vientos soplan en otras tierras y quizás digamos Dios nos libre y guarde que lleguen semejantes locuras sin pies ni cabeza.

Nicolás Sarzoky quiere que los franceses sean más franceses todavía, por eso ha dado a conocer esta semana sus propuestas para “reforzar la identidad nacional”. Bajo el epígrafe Cultivar el orgullo de ser francés, el Ejecutivo galo propone la obligatoriedad de cantar (al menos una vez al año) La Marsellesa; la firma de un contrato ciudadano que recoja sus derechos y obligaciones; y la presencia de la bandera tricolor y la Declaración de los Derechos del Hombre en todas las escuelas.
Los españoles ya se lo están preguntando, y mas perdidos que turco en la neblina 6 de cada 10 lo aprueban en las primeras estimaciones. No tardará en llegar a estas playas ¿Quién puede oponerse a lo que viene oliendo a hermandad y unión nacional, en medio de esta tormenta de enfrentamientos permanentes? léase pensamiento único por decreto.
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¿Quién es el que va a afrancesar a los franceses? Pues un pequeño húngaro por no decir Huno, petiso, negrito, fanfarrón, bruto y prepotente como todo el pueblo de Atila, de madre Griega y Judía, ni prójimos de algo que parezca francés.
De allí que no puede sorprender que ser un buen francés se limite a ser chusma de la comuna de Paris y partidario del Terror.

Imaginemos la iniciativa en argentina solo como ejercicio mental, pues todo depende del dictador que la organice. Podrán ser tamales, carbonada, carnavalitos y quenas todas las semanas; cabrito asado, alfajores, empanadas, humor cordobés y guitarras o chipa guazú, sopa paraguaya, chicharrón y acordeonas, cantar una zamba una chacarera o entreverarse en una payada, Usar un carro polaco, el caballo, el sulky, el quatriciclo o el BM para buscar la provista o ir “de shoping”, el sol de los incas, la estrella de David, San la Muerte, el gauchito Gil, la pachamama o la medialuna en escuelas y oficinas. Bustos del General, del pescado y la yegua en plazas y paseos. Visitar los museos de la memoria y recorrer la avenida de los DDHH. ¿se podrá comer pizza y hamburguesas o solo choripan y tortas fritas?
Sorprendentemente estos personajes son los que llaman despectivamente fundamentalistas a los Talibanes y prohíben crucifijos, minaretes burkas y chador por ser inaceptables a la república y su sacrosanta igualdad, talibanes que no por casualidad se educaron en Francia.
De llegarnos la peste absolutista unos hablarán de la gente del campo y otros de los campesinos Los que comienzan nuestra historia en Castilla y los de los pueblos originarios. Una Babel ideológica.
La unidad que será el fermento que por natural reacción de defensa embravecerá localismos y particularismos que estallaran en autonomías y separatismos. Caudillos y montoneras federales no existían, nacieron como reacción a la prepotente soberbia de los unitarios centralistas del puerto.
Si de un solo bocado el animal se comió a Vercintorix a Carlomagno a la doncella de Orleáns, a Galos, Francos, Aquitanos, Bretones, Gascones, Normandos, Provenzales y Borgoñones, que eran gente brava y con milenios de cultura, con las exquisiteces que preparan y los maravillosos caldos que producen, sin contar al otro pequeño corso no francés, cualquier cosa es posible.

No hay que desesperarse, solo en el ocaso los enanos proyectan sombras que los hacen sentir gigantes, capaces de imponer cualquier burrada.