HACIA EL SINDICALISMO CORPORATIVO OBLIGATORIO
Reaparece la antigua metodología Nazional Socialista y el corporativismo Fascista alentada hoy desde las “asambleas” que “piden”(quien pide?) la unificación de las entidades, con el aval de la perdida de confianza en sus dirigentes, por sus confusos mensajes y actitudes.
El tradicional método totalitario de disciplinar toda protesta y voz discordante sometiendo las decisiones a los caciques gremiales, delegados personales del mandamás de turno y miembros del partido único.
Quien quiera acceder a la limosna oficial debe tener su carnet de afiliado al día, (los proyectados subsidios y reintegros ya lo prevén) los nuevos “gordos dirigentes” que el poder se encargará de promocionar contentos, podrán acreditar una “representatividad” que sus antecesores nunca tuvieron.
No resulta impensable que en poco tiempo aparezca un Moyano queriendo quedarse con los afiliados de otro y hasta piquetes de la Sociedad Rural en Liniers impidiendo el ingreso de hacienda que no sea de sus afiliados.
Parece broma pero es para llorar, la vocación suicida de los argentinos. No quiero ser terminante ni agresivo, pero en mi limitado castellano no encuentra otro término para definir con precisión a los autores de la iniciativa: ¡imbéciles!
Me reservo por una razón de buen gusto el que les corresponde a los que por dejarse basurear han allanado el camino a estas ideas.
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