Es conocido el relato, el humo del sacrificio de Abel, ascendía hacia el cielo, el de Caín se arrastraba por la tierra, la envidia y el odio hicieron el resto, el primer asesino y el primer maldito por generaciones de la historia. Las primeras mentiras de la humanidad. Mintió al hacer un ofrecimiento con el corazón emponzoñado y mintió al no hacerse cargo de sus actos.
Hubo fuego que fue intencional e intencionalmente no lo combatieron los mismos que lo hicieron. El humo no ascendió al cielo, se arrastro en la tierra por condiciones atmosféricas, que no responden a los hombres.
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