A VECES DIOS NO QUIERE

Con la llegada del último mes del año apareció la solución de diciembre, para el tránsito urbano, se licita la construcción y concesión por veinte años de playas de estacionamiento subterráneas.

En verdad, desde hace un año que asumieron el gobierno, las soluciones anunciadas fueron más de una por mes, hasta ahora todas fracasadas y que no pudieron sostenerse más de 30 días. En principio, esta que deja la creatividad de lado, pareciera más coherente, es ni más ni menos que devolverle a la ciudad parte de los espacios que eliminaron los proyectos inmobiliarios, pero, desgraciadamente en Buenos Aires siempre hay un pero, sólo 20 mm. de lluvia anegaron calles, túneles y subterráneos.

Guillermo Montenegro, ministro de Justicia y Seguridad porteño, dijo en declaraciones televisivas que los inconvenientes se debieron a que "fue la lluvia más fuerte del último año ya que cayeron más de 50 milímetros en menos de 40 minutos" y que si bien "estaba todo preparado" la tormenta "los sorprendió casi dos horas antes de lo que se esperaba".
Sin embargo, el Servicio Meteorológico indicó que fueron 12,7 los mm que cayeron y empresas privadas estimaron que la medición fue entre 15 y 20. La politicaonline.com 30/11/08 Resaltado propio.

Poco importa discutir un milímetro más o menos es una cuestión técnica propia de ingenieros. Me atengo a lo que he visto y lo que veo. En cuarenta años he visto llover muchas veces cien mm. en un rato y nunca me mojé un zapato. El puente de Salguero, la Boca y la cuenca del Maldonado tienen una tara congénita, que depende más de la sudestada que de la lluvia caída.

Mirando la galería de imágenes que se acompaña represéntese usted lector, el episodio: 50 mm de lluvia son cincuenta litros (dos bidones) de agua por metro cuadrado en cuarenta minutos, mientras los desagües seguían evacuando los treinta mililitros por hora, que es su máximo esfuerzo. ¿La cuenta coincide con la imagen? Hasta que se terminen las playas se agravará el tránsito por las obras y después habrá que resolver la cuestión de los drenajes pluviales o hacerse cargo de miles de demandas por daños y perjuicios, obras que hace un año están en marcha pero cada vez toleran menos agua, de esperarse a la terminación de las playas, a este paso un rocío que se anticipe dos horas, sorprenderá a las autoridades que tienen todo preparado (¿?) e inundará la ciudad.

Decir cualquier gansada no es informar ni comunicar, no aclara oscurece y agravia gratuitamente el sentido común de la gente.

En las supuestas antípodas políticas el gobierno de la ciudad y el de la nación, más que disentir compiten a ver quien miente más y mejor y agravia la inteligencia de todos.

Lo escribía días pasados no necesitan que les peguen ni les pongan palos en las ruedas, se cocinan solos en su propia salsa.

Galería de imagenes

Todos anuncian, los de arriba que esta todo controlado y cada día mejor, los del medio que la ciudad ya esta buena, sugiero leer el graffiti en la pared del subte (1ºfoto de la galería) “A veces Dios no quiere”

Vaya usted a saber en que estaba pensando el que la escribió. Pero Dios si quiso que apareciese en la foto para que la vieran todos. Las sentencias de la sabiduría popular suelen ser inapelables, más allá de las intenciones de sus humildes magistrados.