Foto El TerritorioSiete toneladas de droga, que debían recorrer por rutas supuestamente vigiladas tres mil kilómetros para llegar a destino en el sur, curiosamente donde opera Conarpesa la pesquera española socia de los Kirchner, denunciada por tráfico de drogas a España. Son incautadas a menos de cincuenta kilómetros de su ingreso al país. ¿Traficantes improvisados, información para tontos o una exhibición de eficiencia de Fernández, Jefe de la Seguridad la Justicia y los delincuentes?
Un camión detenido en la noche con el motor en marcha aparentemente abandonado con un celular en el asiento y todos los documentos del conductor, en la entrada de una precaria casilla vacía, un solo detenido a las 24 horas en otra provincia a 600 Km.
Un cargamento de algodón para disimular la marihuana. No hay algodón en Misiones ni se importa del Brasil por Iguazú. La sola guía de carga con la mercadería, su origen y destino bastan para que cualquier despistado detenga el envío. Pero cruzó la frontera, ingreso al país y salió de Iguazú con varios controles en la ruta. ¿Mucho no?
Así trabajan una fuerza creada para controlar las fronteras, la Aduana y la dirección de Migraciones desde que las comanda el protector de delincuentes.
La foto que ilustra el artículo tiene lo suyo (es la primera, las otras dos se agregaron posteriormente) muestra los clásicos paquetes de cocaína muy distintos en su aspecto y contenido a las bolsas de marihuana. En el camión dicen que había algodón, la marihuana estaba en la casilla. La prolijidad en argentina es una materia pendiente de gobernantes, fuerzas de seguridad y periodistas.
En esta provincia de Misiones, hace años que hasta los críos de guardería saben que cargamento de drogas que se encuentra, esta dirigido a la gendarmería o prefectura para que lo encuentren.
Por aquello de hacer estadística y que le quede entre pesaje y pesaje una propina a los muchachos, para silenciar curiosos o no caer en la tentación del cumplimiento del deber.
Cuando se trata de cocaína los paquetes traen una marca para los que están en el negocio, cuales hay que abrir y analizar y cuales tiene yeso o talco para hacer bulto, a ningún narco que aprecie su vida se le pierden por estupidez en menos de un año, diez y ocho toneladas de mercadería.
No es para preocuparse, es anecdótico, en Argentina el 75% del consumo juvenil es recreativo solo el 5% son adictos que se hacen mal a si mismos o a terceros. Estadísticas y palabras oficiales del gran Padrino de la seguridad y justicia.
Todos recorren distintos caminos para no molestarse, delincuentes por un lado y drogadictos por otro, narcotraficantes por su ruta, gendarmería y policía por otra, todos felices y contentos. Nada mejor que la armónica convivencia, dejando que pueda recrearse la inocente gurisada.
Laura Etcharren, una conocida profesional estudiosa de estos temas, desnuda otras mentiras acerca de la candente inseguridad.
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