UNA FRORMULA IGUAL A CERO
CRONICA DE UN SUICIDIO ASISTIDO
Finalmente eligió el suicidio asistido en buena compañía alrededor de mil procesados, condenados, imputados y sospechosos, solo faltaron los jueces federales que se perdieron la oportunidad de ser tapa en la prensa del mundo con un megacelular que a la salida se los llevase a todos.
El suicidio asistido es una nueva moda en todo el mundo, no podíamos permanecer al margen y naturalmente por razones jerárquicas debía ser estrenada por la presidente.
Comenzaron practicándolo enfermos terminales, desahuciados por la ciencia médica, para acortar sufrimientos, como toda moda se expande a otras esferas y llegó a la política.
Casos perdidos que transpusieron el punto de no retorno y no pueden volver atrás sin grave mengua de su dignidad.
Un brusco salto adelante hacia la historia que más vale la escriban ahora sus beneficiarios y no ignorantes y tendenciosos historiadores del futuro.
De paso zafan del desmadre, de la cárcel o el hospicio con chaleco de fuerza, todas ventajas contra ninguna; ya no pueden ejercer la mínima libertad de salir a la calle o mostrarse en público sin asegurarse previamente una fuerte presencia de mercenarios que los rodeen.
Convocó a toda su familia política para expresar su última voluntad: decidió sacrificarse por la patria y por el muerto, incluso ¡el viento del sur introdujo en el salón el alma en pena! elige el suicidio político asistido de ir por la reelección y nos dejó un vice para castigo de todos que sabe que no la soportan. Una definición casi perfecta del suicida: se elimina para cargarle las culpas al los que odia.
¿No me había creído que en la nueva argentina todo sea posible?
Nadie tenía alguna duda de su incapacidad, cinismo e hipocresía, tampoco de su temperamento histérico y caprichoso como de su megalomanía de vuelo bajo.
Precisamente por eso esperaba el nombre del vicepresidente, un cargo inesperadamente trascendente ya que atento a lo que hay a la vista; es un titular a plazo fijo.
En materia de Primera Dama reemplazó una yegua con aires de reina por una democrática “soy putísima” Profundizar el modelo le llama.
Repasaba el extenso listado de serviles que la superan en idiotez. Un bultito que no haga sombra ni hable sin permiso, que no compita y se conforme con un par de juguetitos y los bolsillos bien forrados para hacer todos sus caprichitos.
Por fuera de la lista según los que saben o distribuyen carne podrida, había solo un nombre que es la contracara del perfil mencionado: J.M. Abal Medina.
Lo descarte porque es baraja de otro palo y hubiese sido entregarse atada de pies y manos al petit comité hegemónico de los Abal Medina, Garre y Verbinsky en el que hasta un Dante Gullo sería sapo de otro pozo y se le debe reconocer una sola virtud negativa: No es tonta, tiene la suficiente desvergüenza como para simularlo a la perfección.
Finalmente un mazazo para todos, para los que la acompañan vivan y adulan y para los que sueñan con asarla empalada en un espeto.
Detrás del joven de la nueva generación encolumno a la joven flor y nata de los pibes chorros y soberbios cerebros limados en todo el país, listas propias y ajenas para que no queden heridos.
Ya se había publicado un Quien es Quien muy prolijo casi oficial; hay otro más real que se está tamizando.
Solo me queda una ultima esperanza y sincero deseo que en octubre se consume todo lo propuesto; que gane en primera vuelta y gane por robo para que con la colaboración del candidato opositor para que desaparezcan de una vez por todas peronistas y radicales peludos.
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