TEORIAS ECONOMICAS

Las hay que nacen en institutos y universidades avaladas por siglos de prestigio y las hay que circulan sin certificación de origen; en tanto sean teorías tanto valen unas como otras, el paladar del consumidor les dará o quitará crédito.
Me ha llegado una desde España que pese a tener su tiempo circulando creo bien vale la pena conocer, dada la situación local y mundial le viene de perillas; quizás solo explique el porque, valga la paradoja las crisis son crónicas, una vez que aparecen nunca se van. Al menos puede ser útil para no gastar pólvora en chimangos o dicho más claro no mear fuera del tarro.

TEORÍA DE MARC FABER

Teoría económica enunciada en Estados Unidos por Marc Faber, analista de inversiones y empresario.

En 2008, cuando el Gobierno Bush estudiaba lanzar un proyecto de ayuda a la economía americana, Marc Faber escribía en su boletín mensual un comentario con mucho humor:

"El Gobierno Federal está estudiando conceder a cada uno de nosotros una suma de U$S 600.-
Si gastamos ese dinero en Walt-Mart, ese dinero va para China.
Si gastamos el dinero en gasolina, va para los árabes.
Si compramos un ordenador, el dinero va para la India.
Si compramos frutas, irá para México, Honduras o Guatemala.
Si compramos un buen coche, el dinero irá para Alemania o Japón.
Si compramos tonterías, se va para Taiwan, y ningún centavo de ese dinero ayudará a la economía americana.

El único medio de mantener ese dinero en USA es gastándolo con putas o cervezas, considerando que son los únicos bienes todavía producidos aquí. Yo, estoy haciendo mi parte..."

Respuesta de un economista Español:

"Estimado Marc:
La situación de los Norteamericanos es cada vez peor, y lamento informarle que la Budweiser fué recientemente comprada por la brasileira AmBev. Por lo tanto, le quedan solamente las putas.

Ahora bien, si las putas, decidieran mandar el dinero a sus hijos, el dinero iría directamente hacia el CONGRESO DE LOS DIPUTADOS DE MADRID, donde existe la mayor concentración de hijos de puta del mundo"

Cierta dosis de humor no es incompatible con serias y medulosas reflexiones y posiblemente ayude a entender lo evidente.