agosto 13, 2009

¡¡¡ OJO !!!

Los animales percibe las vibraciones que anticipan el desastre, los hombres racionales las desprecian, incluso lo ven y se quedan a mirarlo.


Descreimiento, indignación, furia y un sistema político que es una dictadura que cierra todos los caminos que no sean participar en la corrupción en que se funda; todos los ingredientes presentes para una guerra de otro signo.

Puede ser querida o provocada: la calentura siempre es mala consejera, no hace falta mucha perspicacia para anticipar el resultado.

Si es espontáneo ¡Que Dios nos asista!
Prefiero Su mano, por dura que sea que la de un iluminado salvador humano.

Sea de una forma u otra no hay alternativa; esta en marcha y va a llegar, paso el punto de no retorno.

Si lo pasado fue malo lo que están preparando los cocineros sociales y políticos es peor, porque esta vez no hay fuerzas armadas capaces de sacar las castañas del fuego, aunque después se quemen al abrirlas y no sepan como dejarlas.

Los responsables son los mismos que desde hace medio siglo con su egoísmo, alquimias y ceguera llevaron al siguiente capítulo, para culminar la obra en esta aberración contra natura.

No dejaron ni rastros de alguna obra propia o ajena, solo quedó tierra arrasada y generaciones quemadas.

Hay tantas listas negras de culpables como habitantes en el país. Esta vez será muy difícil que quede alguno con ganas de reclamar memoria y justicia.

A todos asombran la paciencia y mansedumbre, sin reparar que tal cosa no es real. El agua siempre encuentra su nivel, los sentimientos y pasiones también.

DICTADURA se llama el monstruo, use bayonetas, el terror, leyes o la ficción de democracia y estado de derecho, en el PARA SIEMPRE esta su perversa esencia.

¿Una solución? Hay una sola el que rompe paga, si nadie se hace cargo todos los que estuvieron en la fiesta son solidarios deudores.

3 comentarios:

Manuel Mariano dijo...

Una impecable pintura de la realidad, cuesta aceptarla, es dura.

Anónimo dijo...

Este blog es un nido de ratas

LSO dijo...

Por eso te esperábamos Papá