abril 20, 2009

SIN DIAGNOSTICO, NO HAY TRATAMIENTO


EL TIRANO Y
EL AVARO MISERABLE
¿DICTADURA O TIRANIA?
Son los términos que cotidianamente aplicamos al gobierno, por esa perra costumbre de simplificar, más allá de disquisiciones semánticas. Ni una cosa ni la otra; aún cuando lo parezca en el estilo de gobernar y relacionarse con los suyos y los que se oponen. La diferencia es sutil. Carecen del perfil psicológico del dictador o tirano.
En el caso de Néstor Kirchner es personal y genéticamente un avaro usurero prestamista. Jamás arriesga, solo juega a ganar, nunca va a imponerse por su propia fuerza; se gasta y eso es sacrílego, se impone forzando al otro a doblegarse, compra lo que haya que comprar si el beneficio lo justifica, en caso contrario extorsiona y aprieta. Carece de moral, principios e ideología, acumular es su sino, no para gastar, invertir o disfrutar sino para seguir acumulando y solazarse contando todo lo conseguido.
Carece de planes y objetivos, por eso camina en círculos alrededor de su tesoro. “Ubi bene, ibi patria” (donde estoy bien, allí mi patria) Dónde esta la bolsa allí está el corazón. No es casual que tenga un ojo fijo mirando al costado.
No perdonó al campo ni a Cobos o Montoya porque eran sus siervos, el les paga con la caja del estado que es suya; para que hagan y acepten lo que ordena, ¿acaso el campo no aguantó en silencio retenciones cada vez más altas, desde el inicio de su gestión? ¿Quien es ese Cobos al que le regaló la vicepresidencia para que sirva sin chistar como Scioli; o ese Montoya al que le dio apoyo en todas sus excentricidades? No es un gran político, tirano o dictador aunque su gobierno lo sea.
Un amo avaro y miserable es el verdadero perfil. Mayor vergüenza para los que consintieron que un gusano se apoderara del país.
Carece de amigos, solo tiene siervos, mercenarios y prestanombres. Cuando agrede lo hace con un tono cínico, sobrador y bromista, para el ladrido amenazador, usa su jauría de mastines Fernández, D’Elia, Moreno, Pérsico, Kunkel, Bonafini.

El otro caso es distinto, una acomplejada ignorante poca cosa con delirios de princesa y profesora sabelotodo.
La manda de compras y a pasear cada vez que necesita liberarse de escenas histéricas de entre casa. Las cuentas de sus excentricidades no las paga el avaro, las pagamos todos, por eso la puso, para poner el cuerpo a la avalancha de sus desmadres, si no aguanta no será sorprendente que de pronto sobre un vicepresidente, habiendo un vicepresidente del senado esta sobrando uno para la sucesión; la saque de circulación y la interne. Hay antecedentes de familia para que resulte creíble y acallar a los quisquillosos. Los usureros prestamistas no tienen herederos, que puedan malgastar la fortuna.
Sin un diagnóstico correcto no hay tratamiento posible, el “exitus letalis” es la consecuencia obligada.
Cuidado Don Cobos, se esta hablando de contrabando de ricina, un pinchazo y a otra cosa.

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