En política son sinónimos, en historia son los responsables de todos los estallidos irracionales, psicológicamente son los que no se juegan para quedar al margen y salvar su huerto. Ni blanco ni colorado
–Dialoguemos muchachos, hablando se entiende la gente.
Para entenderse hacen falta dos que quieran hacerlo, de la misma manera que dos no pelean si uno no quiere.
Cuando se llega a un nivel de agresividad a punto del estallido es porque alguien provoca sistemáticamente y otro aguanta hasta más allá del límite. Pasa entre los críos, en los matrimonios, parejas, en el trabajo, en el tránsito.
No es una genialidad que se me ha ocurrido, lo sabe cualquier idiota y lo niegan los que se pintan de gente seria y responsable.
Aceptar que esto es así, implica adoptar la posición que corresponde y es allí donde se queman los papeles, los dirigentes políticos y sociales carecen de respuesta dentro de la rigidez de su pensamiento.
Ocurrió en el 73 y estallo en el 76, ocurre ahora y estallará mucho peor, porque la agresión esta vez no deja a nadie de lado, de una forma u otra todos la sufren.
En Argentina entre otros se llamaron: Balbín y Alfonsin, se llaman Mesa de enlace, Episcopado y dirigencia política.
La cuestión pasa porque en toda actividad los responsables o dirigentes, son figuritas decorativas carentes de condiciones.
Unicamente habilidosos en mover influencias, tejer alianzas y limitar su opinión al NI, ni si ni no.
Faltan cojones se dice en castellano.
No hay comentarios:
Publicar un comentario