No es un video parcial, no existen fotos o videos de los misiles palestinos sobre Israel y la masacre del pacífico pueblo judío porque eso no ocurrió.
Es curioso lo que ocurre con la guerra en Palestina. El mundo oficial ni mosquea, pero todos los periodistas y analistas se han desestabilizado, unos haciendo equilibrio en la cuerda floja para poder escribir una línea objetiva sin caer en “antisemitismo” y otros se lanzaron al vacío sin red para justificar lo aberrante.
El viejo juego de provocar e incentivar al malo para justificarse y hacer lo peor. El interminable ojo por ojo y diente por diente en su más cruda expresión.
Discutir la moralidad o legitimidad de una guerra es una entelequia, siempre sobran buenas razones para aducir legítima defensa o una guerra preventiva. buscar justificativos es hipócrita, quien lo cree, lo hace y carga con las consecuencias, lavarse las manos por anticipado no sirve, al final igual quedan sucias.
Sorprenden los malabares intelectuales a los que se recurre para no hablar mal de unos o de otros, de acuerdo a donde se está parado.
No puedo opinar sobre una guerra que no es mía, no tengo nada que ver ni responsabilades con ella. Todos los limites de este antiguo enfrentamiento son confusos, en el siempre hubo más manos ajenas que propias. Se ha sembrado demasiado odio para una discusión razonable.
Pero si puedo y creo que debo, distinguir entre una guerra en que se mata, hiere y destruye, una antigua vocación de los hombres e impedir el auxilio, entierro de los muertos, atención de los heridos, huérfanos e imposibilitados; una ley de la guerra jamás violada, por los peores carniceros.
Actitud propia únicamente de quienes han renegado de su condición humana.
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