Un enunciado solo posible cuando la ley está por encima de la razón, el bien y sentido común al servicio exclusivo de la autocracia legal.
Créase o no parece una reedición con adaptación local de la movida de Zelaya en Honduras que lo mandó hacer turismo como invitado VIP de Castro, Chávez, Obama, Lula, la OEA y la CE, sin olvidar que estuvo a punto de desencadenar una intervención armada con la bendición de todos.
En aquella ocasión, escribí, sin quererlo, casi como anticipo:”Curarse en salud” Demasiado ruido para tan pocas nueces, más parece el ensayo general de una tragedia que se estrenará en un teatro más importante.
Oficialmente parece que consiste en solo dos grandes medidas, retorno a la elección presidencial indirecta e internas simultáneas abiertas y otras pequeñas bien ocultas como alternativa o para negociar. El congreso argentino, tan democrático y ansioso de debatir, está siempre listo a negociar y cambiar figuritas.
¿Por qué justo en este momento lleno de problemas sin resolver? Porque fracaso el intento de servir gato por liebre en el diálogo político y los tiempos queman. Los gobernadores no pueden pagar más ni su propio sueldo, y es sabido que hasta la hacienda baguala cae al jagüel con la seca.
Parece, solo parece que retroceden, en realidad toman impulso para otra embestida, no dan puntada sin hilo, son piñón fijo, como todos los tiranos no aceptan un NO.
La primera reforma era casi una obviedad, visto el aceitado y exitoso mecanismo de compra de votos y control de cuerpos colegiados sumado a darle a los distritos menores donde el clientelismo es más barato y los escándalos no hacen tanto ruido preponderancia sobre los mayores que se les han vuelto en contra.
Sobre la segunda provisoriamente no opino por falta de información fidedigna pero me opongo, porque nunca supe de un lobo garantizando que las ovejas pasten en libertad.
El proyecto pasará intacto como por un tubo por el senado si es que no lo empeoran.
El 2011 no es una elección más, se juega la impunidad y el poder vitalicio con derecho de sucesión.
En la oposición solo está el partido de los crédulos, según los llamó María Zaldivar, que siendo mujer puede ser fina, delicada muy punzante y filosa, una conjunción imposible para el suscripto. Ver todo.
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