Ni una cosa ni la otra, simple venganza irracional, lo mire del lado que lo mire es sucio y cobarde como todo lo que se ejecuta por la espalda con alevosía y premeditación contra inocentes. Sea un ruso, un terrorista, de la resistencia caucásica, separatista vasco o primer ministro israelí.
La diferencia radica que en un caso se sacrifica la propia vida y en el otro se oprime un control remoto y se mira el resultado por TV cómodamente sentado en el propio despacho. En un caso se dirige la represalia contra inocentes sin culpa en la venganza que se pretende consumar y en otros otros el blanco es específico.
Las fuerzas antiterroristas rusas han confirmado este viernes que una de las dos «viudas negras» que el pasado lunes se inmolaron en el metro de Moscú matando a unas cuarenta personas es la adolescente daguestaní (en el Cáucaso Norte) Dzhennet Abdurajmánova, de tan sólo 17 años (nacida en 1992).
La prensa rusa ya había informado este viernes que Abdurajmánova era la viuda del jefe guerrillero daguestaní Umalat Mahomédov, eliminado por agentes de los servicios secretos rusos durante una operación llevada a cabo el pasado 31 de diciembre. Obsérvese el eufemismo eliminado por asesinado, ejecutado o muerto.
Como otros similares es un caso trágicamente patético en el que no puede afirmarse quien es mayor victima si el ejecutor o los sacrificados, cosa e’mandinga dirían los mayores y parece que no estaban equivocados.
¿Dónde va este artículo? Pues donde siempre, a poner los puntos sobre las íes.
Distinguir entre terrorismo, legítima resistencia y operaciones encubiertas no es poca cosa.
Especialmente cuando sobreabundan operaciones con falsa bandera, dirigidas a cargarles el fardo a otros para justificar represalias.
Según hayan sido los tiempos y las épocas, así fue el sambenito que cada uno debió llevar.
Heroicos Kamikazes que en nombre del honor y a falta de otras posibilidades para resistir estrellaban sus aviones contra un barco de guerra e incluso forzando la comparación el recuerdo de Mesada y Numancia.
Para unos el bronce de la historia para otros los archivos policiales.
Terrorista es el que utiliza el miedo o el terror para doblegar la voluntad de otro, condenable en todos los casos. Sean venganzas privadas u operaciones especiales de gobiernos. Utilizando armas, explosivos, la economía, el conocido temor al “salto al vacío" o la angustia de ocupar una tierra arrasada. Incluyo para ser claro a los adultos que extorsionan con la promesa de un premio al pequeño para forzarlo hacer lo que no quiere, besar o ser amable con quien le produce antipatía.
Que haya un muerto o heridos es cosa secundaria, las violaciones lo son sin necesidad de matar a nadie.
La resistencia es otra cosa, al punto que es quien opone legítimamente la fuerza contra otro que pretende forzarlo y doblegarlo.
Tomar como blanco a inocentes que son de palo en el conflicto convierte la resistencia en una canallada cobarde.
El terrorismo es una gran bolsa donde entran rusos, chinos, americanos, ETA, IRA, el extremismo islámico, terrorismo sudamericano, los prolijos israelíes, economistas y políticos.
Tenemos a la vista en todo el mundo terrorismos malos que justifican cualquier respuesta y terrorismos buenos intocables.
En esta época se han hecho hábito la comida chatarra y alimentos predigeridos como la información al paso con juicio incluido.
Excelentes recursos para perder la salud o estar parados en el lugar equivocado.
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