Esto se llama guerra

Argentina bajo la agresión del terrorismo. Los expertos le llamarán guerra de 4º o 5º generación, es la guerra silenciosa, sin misiles ni explosiones. El objetivo es el control de las mentes, a tal punto que ya hay miedo hasta de manifestar las propias convicciones.
Se ha desencadenado una brutal acción de guerra psicológica destinada a suprimir toda opinión que se oponga a los planes de la tiranía, mientras bajo cuerda, se avanza en la destrucción del país.
En este momento los argumentos son los casos mediáticamente instalados de aborto, violaciones, marcha por la inseguridad, reivindicación del terrorismo subversivo, violación a la propiedad privada de la mano de dos funcionarios del ejecutivo, Campos y De Elía, uno invade propiedades y el otro dictamina sobre la estructura de costos de las empresas privadas y el margen que el personaje considera adecuado de utilidades. Instalación oficial de la anarquía social a través de exhortaciones a no pagar esto o lo otro. No hay gobierno usted decide y se hace cargo.
Salvo muy honrosas excepciones la absoluta totalidad de la prensa gráfica y el periodismo de los medios audiovisuales acompañan esta operación repitiendo hasta el cansancio los despachos y trascendidos oficiales. Grupos católicos poniendo bombas en hospitales, información distorsionada y falsa sobre amenazas y fallos judiciales.
De tal magnitud es la operación, que hasta quienes por su investidura tienen la obligación de dar testimonio de la verdad acuñan declaraciones temerosas y anodinas.
Las calles de Buenos Aires son zona liberada para los grupos de choque del gobierno mimetizados de sionistas, fundamentalistas islámicos, jubilados, desocupados, sin techo, etc. En verdad sinvergüenzas, los mercenarios de siempre. A medida que pasen los días la zona liberada será sembrada de trampas cazabobos en la que caerán los “buenudos” y los que hacen gala de “pesados”. El mensaje es montar una gigantesca operación de prensa mundial demostrando la tolerancia oficial al derecho de expresión, en el que esta previsto que no haya incidentes y la actitud de la “derecha genocida” de los “católicos fundamentalistas” todos partidarios de la “represión y la mano dura”.
De acuerdo a la evolución se ajustara de un lado o del otro, de lo que no hay duda es que es un camino sin retorno. Si algo se sale de madre, saltan todos los límites, no es posible la marcha atrás.
Se busca paralizar y dominar por el miedo y esto se llama Terrorismo (Ver: "Terrorismo antiterrorista")
No es una cuestión local, es un ensayo general para toda Hispanoamérica, más vale que los vecinos abran bien los ojos.
La respuesta solo la tienen aquellos que tengan muy firmes sus convicciones. No enfrentamos superhombres sino alimañas que solo tienen el poder del “azote de Dios” para demoler a los corruptos hipócritas y responsables.
La Verdad, no solo nos hace libres sino invencibles, a condición de poner su luz en lo alto, bien a la vista.
Alea jacta est ¡¡¡Al arma, de las convicciones y el testimonio!!!