Quedan en este mundo esmeraldas, perlas y diamantes, cada vez son más raros, por eso cuando aparecen hay que mostrarlos.
Caminando por los medios me acabo de encontrar uno y por eso lo primero es mostrarlo y compartirlo.
A mi criterio es una pieza única, un tema que habitualmente se trata con odio y resentimiento o con la hipócrita sensiblería progresista que apela a la igualdad y fraternidad, aparece como un canto a la diversidad, al amor por lo que se es y se tiene, el orgullo a los mayores y a los descendientes.Una verdadera esmeralda venozalana que no necesita parecer porque es.
Caminando por los medios me acabo de encontrar uno y por eso lo primero es mostrarlo y compartirlo.
A mi criterio es una pieza única, un tema que habitualmente se trata con odio y resentimiento o con la hipócrita sensiblería progresista que apela a la igualdad y fraternidad, aparece como un canto a la diversidad, al amor por lo que se es y se tiene, el orgullo a los mayores y a los descendientes.Una verdadera esmeralda venozalana que no necesita parecer porque es.
(Ver: "Los colores de mi hijo").
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