Las imágenes que acompañan este artículo (un video correspondiente a Irak y otro al Líbano) no tiene un propósito ideológico, cuando tengo que escribir una opinión lo hago con todas las letras. Las imágenes en este caso son harto expresivas de dos verdades; ni lo que ocurre en Líbano es una guerra ni en las llamadas guerras recientes se combate.
Nos encontramos frente a una operación de aniquilamiento total y el combate ha sido reemplazado por un bestial asesinato a mansalva con alevosía y premeditación.
No existe en Líbano ni un ejército ni un movimiento guerrillero que amenace la seguridad de Israel, debe tenerse en claro que las incursiones o ataques efectuados por unidades de Hezbollah fueron en territorios ocupados por Israel, más allá de sus fronteras, ni tampoco lo hay en Irak. Un movimiento guerrillero mimetizado con la población no se combate como si fuese un ejército regular. Esta es una verdad que aprendieron en carne propia los Franceses en Vietnam, a raíz de lo cual desarrollaron su doctrina de guerra contrarrevolucionaria, verdad que despreciaron los sabelotodo del norte y les costo una vergonzosa retirada y hoy les prolongará hasta el infinito el conflicto en Irak. No se trata de recursos tecnológicos o económicos, se trata de no fijar objetivos utópicos.
Absolutamente nadie tiene derecho a meterse en la casa de otro a decirle que tiene que hacer y como.
Es una inmoralidad pretender justificar la demolición de asentamientos civiles masacrando a la población e impidiendo la atención de heridos, con el argumento que los terroristas se ocultan entre los civiles. Si eso es cierto, el procedimiento para neutralizarlos es otro, si no se tiene capacidad para hacerlo,¡joderse! A no vender gato por liebre.
Esto no lo ignora ni un cadete novato de cualquier Colegio Militar, lo sabe el gobierno y el ejército israelí, por lo que es evidente la gran mentira que encierra esta realidad y convierte en cómplices estúpidos de la misma a los que instalan foros, e invitan especialistas a debatir sobre una falacia. Tanto es así que de haber hoy mismo un alto el fuego, los que dejen de morir será para poder matarlos dentro de unos meses en otro conflicto fabricado.
Esto no es un conflicto religioso ni ideológico aunque subyacen diferencias que impiden su resolución, estamos frente a un furioso y demencial odio contra el hombre, claramente “satánico”.
Lleva semanas esta situación, sin que haya disminuido la capacidad de respuesta de Hezbollah, en un país sin puentes ni caminos con todo su territorio visible a los satélites y a la fuerza aérea israelí ¿a quien atacan y que destruyen?
Si el objetivo es continuar la ofensiva hasta arrasar el Líbano con una cobertura legal y justificada, quizás haya que preguntarse quien provee a Hezbollah los inocentes misiles que utiliza, estas siniestras “tercerizaciones” se han hecho y se seguirán haciendo.
Las imágenes del video final que corresponden al conflicto de Irak, muestran sin lugar a dudas como se caza cual alimañas a seres humanos desde un helicóptero ubicado lo suficientemente lejos como para que las presas no escuchen el ruido de los motores ni el de los disparos, en plena noche en medio de la nada.
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