Que pase el siguiente

Es imposible despegarse de Hispanoamérica., pasa uno y ya asoma otro en el horizonte. Todo parece indicar que de a poco le está llegando la hora a México. Tiene una cuenta muy abultada con los subversivos populistas, su gobierno le ha pegado al tirano Chávez cada vez que ha podido y Fox se ha desempeñado como el mejor representante y operador de los EEUU en la región. Tiene petróleo y un pueblo con pocas pulgas y están en vísperas electorales, lo que por si mismo aporta su cuota de inflamables.
Por una vez dejemos volar la imaginación sin olvidar que la realidad frecuentemente la supera.
Prenderle fuego a México con el argumento anti-imperialista, lleva un importantísimo valor agregado; el recalentado malestar de los inmigrantes hispanos en Norteamérica, fogoneado por los irresponsables de Washington, crea las condiciones ideales para propagar el incendio al norte del muro democrático. Aunque desplieguen toda la Guardia Nacional, y hoy ya hemos tenido noticias del envío de 6000 soldados, no va quedar en enfrentamiento de sajones y chicanos. Cuando salten las primeras chispas va a ser hoguera. Días pasados un iluminado dejó caer la afirmación que “a los hispanos les faltaba un Martin Luther King”.
Casi impensable e imprevisible, pero posible, preludio de una gran carnicería interna en la primera potencia del mundo.
Aún cuando en 48-72 horas se restablezca el orden como es previsible, el golpe será mortal. Nadie se imaginó enfrentamientos en la propia casa.
Frente a esto, casi da risa la “amenaza” de los misiles de Kruschev en Cuba o el mismo Ben Laden y su panda de Al Queda. Si pasa, el 11/9 quedará como un fosforito.
No solamente la ciencia, sino la política también avanza incorporando sofisticada tecnología, ya pasó el tiempo de los misiles, del secuestro de aviones, de las cartas con ántrax, de la peste, los virus de Ébola y el Nilo occidental, es menos comprometido y más barato que sus propios “inteligentes” activen y detonen los explosivos problemas que tienen dentro.
Cuando se imagina algo tan grande y posible, es casi imposible no llamarse a la reflexión acerca de para quien trabaja la Inteligencia Norteamericana, o es que están tan penetrados que ni ellos mismos lo saben. ¿No sabían quien era Chávez, que le llenaron los bolsillos de dólares? Casi recuerda aquella exclamación de sorpresa ¡oh! Cuando Castro se proclamó marxista-leninista.
Tanto Inglaterra como los EEUU en los años de la posguerra, tuvieron en sus servicios de inteligencia un verdadero criadero de espías soviéticos, Si ya pasó porque no habría de pasar. Máxime cuando han bajado la guardia en ciertos temas, en razón de creerse el propio cuento de la “desaparición” del comunismo y la “democratización” hasta de los chinos, hoy socios y dueños de su gigantesca deuda. Casualmente el vicepresidente Cheney, acaba de “recalificar” a Putin como Gran Chantajista Energético.
Es sin lugar a dudas el más peligroso personaje que desde la Revolución han encumbrado los soviéticos.
No es casual la reaparición en México de viejas figuritas; el subcomandante Marcos, los Zapatistas y operaciones en Atenco, como para ir calentando el horno.
Parece fantástico; cosacos y chinos más realistas están poniendo la mesa para disfrutar este banquete.
Lamentablemente están entretenidos discutiendo si son justos reclamos sociales, si la policía es violenta o guarda las formas. Por mirar el árbol se pueden comer el bosque.Quiera Dios que La de Guadalupe los proteja, de los de arriba y de los de abajo, de los de adentro y afuera.