No a la discriminación

Esta palabreja irrumpe en el idioma cotidiano para referirse a algunas personas o grupos sociales a los que hay que defender supuestamente por su incapacidad para hacerlo por si mismos, es decir que quienes luchan contra la discriminación, comienzan discriminando como inútiles o incapaces a sus presuntos protegidos. España promueve una ley de igualdad (Ver: "Polémico plan para la igualdad en España") que dejando de lado el engendro, es una clara muestra de discriminación. Las mujeres en España como en todo el mundo representan el 50% ¿por qué entonces limitar su participación al 40%? La constitución Española a diferencia de la Argentina no tiene ese requisito para nosotros puramente declamatorio, que para desempeñar un cargo público exige como única condición la idoneidad.
Exigir un 40% de “cupo femenino” como se dice en Argentina ¿no es lo mismo que prohibir que los hombres superen el 60%?.y esto ¿no es una discriminación? (Ver: "De donde venimos")
Reconozco que cualquier despropósito legislativo o de gobierno en el futuro, si es posible superar lo realizado últimamente, es sólo imputable a los infradotados que han propuesto esta ley y no a las mujeres que sean obligadas a incorporarse a cargos ejecutivos en virtud de la misma.
¿Que se puede esperar de un gobierno y un Estado que se preocupan por el sexo de sus funcionarios (¿obsesos sexuales?) y no por su capacidad, formación o antecedentes? El conocimiento, el juicio y las decisiones son funciones intelectuales superiores que residen en el cerebro, no en los órganos sexuales, al menos ello es la norma en todos los seres humanos.
Si varones y mujeres son distintos es simplemente porque están destinados a cumplir funciones distintas en la vida y su carácter está previsto para realizarlas de la manera más exitosa. Igualar en este orden es francamente contra natura y legislar para ello es aberrante. Quien tiene condiciones llega, independientemente de su sexo. Es incomprensible legislar para que el petiso pueda alcanzar el estante más alto, necesitará sin duda una mayor aplicación o esfuerzo.
Nadie le prohibió ni puso piedras en el camino a Golda Meier ni a Indira Ghandi, miles de mujeres hoy presiden empresas y grandes corporaciones. Isabel de Castilla fue por su acción como reina y le pese a quien le pese, la fundadora de lo que hoy se llama España y lo hizo contra la voluntad de muchos hombres.
“Lo que natura no da, Salamanca y la Ley no prestan”