enero 04, 2007

Desaparecidos; una costumbre muy Argentina

No bien apareció el testigo, se escuchó ese sonido siseante propio de las víboras, - Sésamo ciérrate- y la piedra selló la entrada de la cueva hasta el próximo lunes, (en que los autoritarios volverán a Bs. As), desaparecieron Alí Babá y los 40 ladrones.
Es cierto que somos animales de costumbres, hubo otro Diciembre que se llamó Cromagnon, también entonces clausuraron la cueva y desaparecieron todos.
A la soberbia del caso Gerez le agregan la de ponerle plazo para desactivar la desvergüenza, una semana y todo debe estar como antes, voluntarismo puro. Cromagnon lleva años y sigue presente, eso si los amigos y responsables intocables.
O tienen listo el segundo acto o solo fue un globo de ensayo para justificar lo que viene. Racionalmente es difícil aceptar sin más tamaña grosería y la muestra de soberbia parece que tampoco tiene límites; de ser así su poder es un castillo en la arena, no es en efectivo ni en cheque certificado, un vulgar plazo fijo no renovable.
La reacción de la sana opinión pública fue lapidaria, expresada modestamente en cartas de lectores y foros. Hasta el periodismo se ha llamado a prudencia repitiendo únicamente por boca de ganso los anémicos despachos oficiales sin condimentos personales. Hay conocidas excepciones, pero es larga la cola de idiotas a los que pegarles, ¿que columnista de un importante diario se refirió a las brutales torturas sufridas por Gerez?
Y esto es sano, no por pequeño menos trascendente, casi diría el camino que por hoy, que todos debiéramos transitar. En lo personal me place ver confirmar lo muchas veces sostenido, hay que dejarlos, se manean con sus propia baba venenosa, esa es la oportunidad y el momento de poner blanco sobre negro y golpear sin pausa cuando pierden asidero.
Hoy por hoy, hay más miedo en los despachos oficiales que en la calle. Pueden perder todo lo que usurparon o tomaron por asalto, los argentinos ya perdimos hasta el orgullo de serlo, de aquí en más solo podemos ganar y recuperar terreno.
Como programa suena duro, pero es lo que hay. Simplemente una pregunta ¿Quien es mayor enemigo; El que esta enfrente amenazante, o el seductor que está a nuestro lado, retransmitiendo sus perversas mentiras? Al que le quepa el sayo que se lo ponga. De todas formas serán eliminados por unos u otros, los grises y tibios son el jamón del sándwich destinado a ser triturado por la mandíbula de arriba o la de abajo.
Algún comedido, más bien infradotado sacó de la manga un “nuevo caso carrasco” para volver a golpear a los argentinos, militares y civiles, que no integran sus cuadros subversivos. Que sigan, quedarán más enredados que con el “testigo”. Los plazos se acortan, viene el bloqueo del puerto de Bs. As., otra agresión al Uruguay y a los argentinos, todo bien digitado, y esta vez serán los honestos y humildes ambientalistas contra los poderosos que veranean en Punta del Este, un planteo “socialmente correcto” Pero es harina de otro costal y volveré sobre el punto, lo invito a informarse. Otra oportunidad para pegar fuerte; en Marzo hay elecciones en Entre Ríos y se expide el Tribunal de La Haya acerca del Bloqueo al Uruguay, dicen que más vale pájaro en mano que cien volando.
Con suerte, si nos portamos bien los reyes nos traerán regalos y no se escuchará el lunes 8 el -Sésamo ábrete-.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Miedo tiene la gente cuando sale a la calle.
Miedo de que te roben, de que te maten, de que violen a tu mujer o a tus hijas.
Miedo tiene la gente con su trabajo, miedo de perderlo y ya no velver a encontrarlo, miedo a que todo lo que tomó años contruir, se desmorone en 2 minutos.
Miedo tiene el taxista que cuando sale a trabajar no sabe si va a volver porque se trata de una profesión de "riesgo".
Los políticos no tienen miedo, porque lo peor que les puede pasar es quedarse sin el gobierno, en cuyo caso se van a sus casas a disfrutar de sus millones y a divertirse obstaculizando al nuevo gobierno.
El miedo solo lo tiene la gente decente, jamás podrán sentirlo ellos, no se olvide.

Anónimo dijo...

La pregunta que me surge es...¿ vive realmente Argentina en una democracia?....

Democracia no es solo ir a votar cada cuatro o cinco años al presidente de turno....

Saludos.