A esta altura de los conflictos no puede presumirse que quienes lo hacen es solo por ignorancia. Continúa un dirigente de la mesa de enlace, un cabecilla de movilizaciones, políticos y pretendientes reclamando el reinicio del diálogo entre representantes de los productores y el gobierno para acordar un plan integral agropecuario.
¡¡¡No pudieron en tres meses acordar sobre una resolución y ahora quieren ordenar la totalidad de la producción y comercialización agropecuaria!!! ¿Cosa de imbéciles o canallas que traen el facón bajo el poncho?
Los De Gennaro, Alderete, Ripoll, Bonasso, de la Sota, Binner, Schiaretti, Juez, no son carmelitas descalzas que dan puntada sin hilo.
¿;Cual es la razón que posibilitará otros resultados con iguales procedimientos?
¿;Cual es la razón que posibilitará otros resultados con iguales procedimientos?
Terminamos de escuchar reiteradamente por boca de quien preside el gobierno, que sus funcionarios, a los que respalda, solo cumplen sus directivas porque es la única responsable de las decisiones del ejecutivo.
Horas antes quien reclama el diálogo se quejaba del accionar de un organismo del gobierno, la ONCCA, en la practica la GESTAPO para el campo.
¿Dónde me pregunto y lo hacen muchos, puede llevar un diálogo cuyas conclusiones son negadas o desnaturalizadas por funcionarios menores? Sin garantías que entre gallos y medianoche aparezcan “resoluciones” de secretarios que la presidente avala.
Después de todo lo ocurrido, rematado por la pública defensa de un tren bala que no nos costará un peso y el muerto de Aerolíneas no hay en todo el mundo quien pueda seguir sosteniendo la falacia de las retenciones como herramienta de distribución de riqueza. No obstante con un descaro que asombra se insiste desde el oficialismo en lo mismo, se lo acepta y tolera desde la oposición. La cuestión parece reducirse al monto de la alicuota.
El único dialogo posible es con los legisladores, ni siquiera con sus jefes partidarios y el único tema es desmantelar los resortes legales en que se apoya la tiranía, cesión de poderes y atribuciones, manejo discrecional de los fondos públicos.
En tanto esto no ocurra todo lo demás no sirve.
Si no puede obtenerse por falta de apoyo o razones numéricas de votos quedaran los responsables en evidencia y habrá que buscar otros caminos de protesta y legítima resistencia que no son esperar tiempos electorales con fraude incluido.
Están frescos en el recuerdo los males causados por el complejo de querer ser democráticos de los gobiernos del último medio siglo; civiles y militares que vinieron a ordenar el caos político y desordenaron más, sin conseguir restablecer el curso de las instituciones. Fracasaron la partidocracia, los civiles y militares metidos a políticos, porque todos terminan utilizando el poder sin control.
Es irracional suponer que quien maneja su partido y su feudo con mano de hierro y procedimientos mafiosos, llegado al gobierno, cuando tiene todas las riendas en sus manos, cambie de hábitos. Poco importa que se llame Kirchner, Alfonsín, Duhalde, Rodríguez Saa y toda la panda, bipartidaria.
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