Asume un nuevo gobierno, dicen.

AJ GRRR, PUAJ…es el comentario, ni gobierno ni nuevo, el problema es que continúa y no que empieza, ya está todo dicho. No queda tan siquiera el consuelo de sentarse a disfrutar como se cumplen los anticipos; me falta pasta de masoquista. En las últimas semanas, progresivamente licencié radio, TV y prensa Me zambullí en los libros y recorrí todos los antiguos puertos mediterráneos, la Galia, Germania, Britania, la Hélade y la magna Grecia, Persia, Egipto y Cartago, la Roma del principio, la del medio y la decadencia; conviví con todos sus pueblos, sus caracteres y creencias, compartí sus mesas, sus penas, esperanzas e ilusiones. Nada distinto de lo de ahora, con algunas excepciones: la capacidad de adaptación a situaciones extremas, y la fe inquebrantable en algo, que les permitía disfrutar de un momento con poco menos que nada Hoy después de un buen baño para sacar costras de barro y toneladas de arena, añoro una esclava que me frote, me seque y me vista; taparrabos, quitón o túnica y a otra cosa. En cada casa, tienda o cueva convivían multitudes, los vivos y la presencia permanente de todos sus mayores y recuerdos, sin tanta comunicación nadie estaba solo, así fuese en medio del desierto, del mar o de la vida. Cada uno solo contaba con si mismo, hoy tenemos toda clase de asistencias, garantías y derechos y transitamos la vida, más solos que ellos; porque hemos perdido hasta la capacidad de valernos por nosotros mismos o aceptar aquello que no está en nuestras manos cambiar.
Lo bueno de estos viajes al pasado es que uno siempre se ubica en una posición medianamente acomodada. La imaginación nunca juega en contra
En fin, era duro, no hagamos un verso, había que ser humanos para aguantarlo.