También había una vez un país a destiempo de la hora del mundo y la historiaSu presidente utilizaban costoso relojes de utilería para mostrar, que no daban la hora exacta y después de hacerse fama de memoriosa recitando cifras e índices sin leer, muestra estúpidamente el “blue tooth” en el oído por el que le dictan lo que debe decir.
Proyectaron costosas y complicadas operaciones para extraer gas justamente cuando el mundo lo rifa. Su valor dicen que cayó como tejo. Incluso se ha negociado por debajo de dos dólares el millón de BTUs (British Thermal Units), desde los catorce a los que se intercambiaba hace ahora cuatro años
En tanto a los usuarios del país a destiempo les aumentan las facturas de consumo de gas y las modestas garrafas.
No es noticia de tapa, del telediario ni de la cadena nacional, por eso se la cuento. Si le interesa el tema puede leer la info completa
No todos los Rolex Datejust de oro y diamantes valuados en 42000 dólares dan la hora exacta, fueron diseñados solo para mostrar, es de muy mala educación y pésimo gusto una señora mirando la hora, perdón, dije señora, en una ordinaria se justifica cualquier cosa.
Llegado a este punto en el país a destiempo descubren después de 10 años que ciertos organismos o empresas absolutamente técnicas deben estar en manos profesionales, el anuncio tuvo sus bemoles repartió culpas sibilinamente a sus propios ministros, empresarios y sindicalistas en un despliegue de cinismo pocas veces visto, para ir a darle un beso cuando terminó al mayor responsable, antes que se retirase con la cabeza gacha ¿una Judas rediviva?
El monólogo fue para la tribuna, nadie piensa designar profesionales de mérito en la corte Suprema, la justicia, el Banco central, la Anses, trenes, aerolíneas y rutas, porque son servicios para los de infantería, no producen un cobre para la caja, solo generan gastos.
Quedó picando otra duda, el mejor experto del mundo que se mueve en el mundo petrolero dónde nadie cuida el centavo para llegar a fin de mes no parece haber aprendido en Londres a vestirse; una nimiedad se dirá, es cierto, pero a falta de información, con pequeños detalles se construye el retrato.
No nos preocupemos: la conducción será política de la señora con el Rolex descompuesto y sus asesores: el máximo idiota y el marxista Axel el que sentenció “que la seguridad jurídica es horrible” ¿Qué dirá don Galuscio el experto en fusiones y “joint venture,” del concepto del viceministro de Economía, interventor en YPF y asesor estrella de quien toma las decisiones políticas; le darán seguramente una sólida base para negociar; poca vida se le ve al tandem, no pueden mezclarse el agua y el aceite.
De hecho parece que es a plazo fijo, el 4 de junio es la asamblea, recién entonces se conocerán los nombres del multitudinario directorio, del presidente y será designado el gerente general a los que el ingeniero deberá subordinarse, cuando lo designen y asuma, si es que en este país a destiempo llega ese día encontrará la cancha bien marcada.
No tengo porque dudar de su hombría de bien, capacidad personal, experiencia y antecedentes en la materia, pero se me hace que le falta envergadura y trapo para navegar estos mares embravecidos de la política argentina.
Con patriotismo para responder a la invitación y morriña no alcanza.
En poco tiempo, otra vez a destiempo, cambiaremos de caballo en el medio de un río cada vez más revuelto.
Ahora se va a Angola junto al arquitecto responsable de la crisis para que darle la seriedad de la que carece Moreno a negociar inversiones de Angola en YPF, lógicamente el futuro gerente general de un mañana que no sabe cuando será, queda en casa, Basta el anuncio de la dirección profesionalizada.
Las grandes del petróleo festejan gracias a los gratuitos servicios que les prestan políticos opositores y gobernantes en nombre de la soberanía.
Una patagonia entera sin necesidad de guerras ni asesinatos mafiosos que parezcan un accidente aéreo, solo por tener un carísimo reloj que atrasa, no es cosa de todos los días.
Un invierno con mucho gas.
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