Caliente en las calles, la violencia, crispación y agresividad se palpan y helado en las casas, sin energía, sin gas y con poca olla.
Que los rindes de una cosecha iban a crearle problemas a la caja de los 40 ladrones era una fija, tanto es así que han tenido que ajustar el cerrojo del mercado cambiario, la próxima si es que existe será peor, no hay disposición a sembrar a puro riesgo y perdida, lo de trabajar para el estado una vez vaya y pase pero como rutina no vale. Ello significa que el interior se prepara para una economía de guerra cerrando el consumo prescindible.
Por falta de dólares que ingresen no habrá forma de flexibililizar importaciones y detrás de ella caen la producción y la ocupación. El hartazgo ruidoso o silencioso siempre llega y es irreversible.
Aumentos por acá y por allá menos de los ingresos; hay que mantener los trenes, Su Compañía, Su YPF, a todos los zánganos del parlamento y el presupuesto nacional,profundizar el modelo; puede ser que falte comida en la mesa, pero es un importante accionista, algo es algo, ¿no es lo que todos querían?
Hasta se comenta que no sería impensable un Bono patriótico YPF para cambiarle los pesos o dólares de su cuenta y plazos fijos por bonos, paga Dios, prolijamente impresos por Boudou-Van den Broele
¡Quien se puede negar a financiar lo que todos quieren” , No se haga un drama, tampoco le van a preguntar.
El apoyo masivo al gobierno es axioma oficial.
Lógicamente es idea de Axel, el ingenioso y honesto marxista de vida ascética que está en todos los detalles, cobra en Aerolíneas, en YPF y en el ministerio de Economía, sin contar otras minucias plata ‘e chipero para tener sencillo.
No es todo malo, tendremos nuevos códigos civil y penal que terminaran de destruir legalmente a la sociedad con fuerza de ley, eso si tendrán garantía Pinedo; se puede cambiar de sexo con menos trabajo que de camiseta, exportamos cosechadoras a Angola para que los tostados que no saben que es, se suban, prendan el aire acondicionado, la radio, el GPS y salgan a pasear por el pueblo a levantar mulatonas tiernitas a las que tentarán con trapos de 1º marca de La Salada. Los angoleños serán negritos pero no tontos, las cosechadoras que llevan es para lo único que sirven.
La verdad escandalizada ha huido del país, no me refiero a la filosófica sino a la objetiva, la del pan pan y el vino vino, ya ni los nombres o el sexo expresan una verdad, todo es relativo al más puro estilo marxista: nada es; todo puede ser y no ser al mismo tiempo y en las mismas circunstancias; con el unánime acuerdo de todos los que mañana le pedirán que les crea porque son la alternativa.
El propuesto procurador general y jefe de los fiscales, el hombre de la presidente: Reposo, falsea su currículum y nada menos que las Naciones Unidas salen a desmentirlo.
Daniel Scioli, el felpudo nacional o la “esperanza blanca” como sugieren algunos desubicados inició una nueva guerra contra el campo, esta vez sin mesa de enlace ni los muñequitos mediáticos y traidores de Coninagro, Federación Agraria y la política, la victoria se inclina del lado de los productores si no se desvían un ápice del camino y cierran filas para impedir ser penetrados por las quintas columnas.
Usted habrá leído ayer la Trilogía de Atila, me consta que a veces la realidad parece ficción y es difícil de creer, pero hágale caso a este tonto.
Atila empuñando el Azote de Dios al frente del pueblo del Alba en este preciso momento galopa por los cielos y praderas de la patria.
Cuando vea caer a los poderosos sin que nadie los toque o escuche restallar el azote no se pregunte contra quien va o porque, acéptelo y punto, hay una presencia revestida de todo el poder que está más allá de la lógica y la razón.
Aumentos por acá y por allá menos de los ingresos; hay que mantener los trenes, Su Compañía, Su YPF, a todos los zánganos del parlamento y el presupuesto nacional,profundizar el modelo; puede ser que falte comida en la mesa, pero es un importante accionista, algo es algo, ¿no es lo que todos querían?
Hasta se comenta que no sería impensable un Bono patriótico YPF para cambiarle los pesos o dólares de su cuenta y plazos fijos por bonos, paga Dios, prolijamente impresos por Boudou-Van den Broele
¡Quien se puede negar a financiar lo que todos quieren” , No se haga un drama, tampoco le van a preguntar.
El apoyo masivo al gobierno es axioma oficial.
Lógicamente es idea de Axel, el ingenioso y honesto marxista de vida ascética que está en todos los detalles, cobra en Aerolíneas, en YPF y en el ministerio de Economía, sin contar otras minucias plata ‘e chipero para tener sencillo.
No es todo malo, tendremos nuevos códigos civil y penal que terminaran de destruir legalmente a la sociedad con fuerza de ley, eso si tendrán garantía Pinedo; se puede cambiar de sexo con menos trabajo que de camiseta, exportamos cosechadoras a Angola para que los tostados que no saben que es, se suban, prendan el aire acondicionado, la radio, el GPS y salgan a pasear por el pueblo a levantar mulatonas tiernitas a las que tentarán con trapos de 1º marca de La Salada. Los angoleños serán negritos pero no tontos, las cosechadoras que llevan es para lo único que sirven.
La verdad escandalizada ha huido del país, no me refiero a la filosófica sino a la objetiva, la del pan pan y el vino vino, ya ni los nombres o el sexo expresan una verdad, todo es relativo al más puro estilo marxista: nada es; todo puede ser y no ser al mismo tiempo y en las mismas circunstancias; con el unánime acuerdo de todos los que mañana le pedirán que les crea porque son la alternativa.
El propuesto procurador general y jefe de los fiscales, el hombre de la presidente: Reposo, falsea su currículum y nada menos que las Naciones Unidas salen a desmentirlo.
Daniel Scioli, el felpudo nacional o la “esperanza blanca” como sugieren algunos desubicados inició una nueva guerra contra el campo, esta vez sin mesa de enlace ni los muñequitos mediáticos y traidores de Coninagro, Federación Agraria y la política, la victoria se inclina del lado de los productores si no se desvían un ápice del camino y cierran filas para impedir ser penetrados por las quintas columnas.
Usted habrá leído ayer la Trilogía de Atila, me consta que a veces la realidad parece ficción y es difícil de creer, pero hágale caso a este tonto.
Atila empuñando el Azote de Dios al frente del pueblo del Alba en este preciso momento galopa por los cielos y praderas de la patria.
Cuando vea caer a los poderosos sin que nadie los toque o escuche restallar el azote no se pregunte contra quien va o porque, acéptelo y punto, hay una presencia revestida de todo el poder que está más allá de la lógica y la razón.
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