Miro hacia arriba porque escucho ruido y dicen que cuando el río suena agua trae. No es algo concreto o particular, es la suma de muchas cosillas aisladas que parecen tener un hilo conductor: El gigante está inestable. Y la conclusión lógica es que o se cae o cambia el equilibrio en todas partes. La primera alternativa no interesa porque si ocurre nos hacemos crema todos, la segunda es para atender porque modifica todo en todas partes.
Vayamos por partes ¿cuáles son las cosillas que hacen ruido? Por primera vez, guerra de Irak incluida, la imagen interna de Bush ha entrado en caída libre, la externa hace rato que no existe. Los hábitos económicos de los norteamericanos, que han ido evolucionando en los últimos años por un consumismo desenfrenado y un endeudamiento desmedido están al filo de una debacle sin precedentes, porque los va a tocar a todos, en sus bolsillos, en sus propiedades, en realidad propiedades de los bancos y financieras. Hasta sus puestos de trabajo pueden colapsar. Hasta el viejo recurso de hacerle pagar al mundo su déficit fiscal se les va a complicar. El gran gigante asiático que comenzó lentamente a desperezarse ahora reclama lugar, quiere comprar las tecnológicas, las petroleras, automotrices etc. Son dueños de casi todos los papelitos de la deuda y lo que es más serio, a los chinos no se los puede apretar, sus tiempos y sus urgencias no son las de occidente. Hasta en Europa se les dio vuelta la taba. En Le Burget, el Airbus europeo duplicó las ventas de Boeing y no es un dato de un negocito menor.
En las elecciones de Irán, que antes de realizarse calificaron de fraudulentas y una vez instalado el nuevo presidente lo proclamaron como el “nuevo enemigo Nº1 de la democracia y la libertad” volvieron a mostrar la hilacha. Brillante la sutileza, no es el enemigo de ellos, es el enemigo de todos los pueblos libres y democráticos. ¿Estarán pensando el viejo recurso de armar un conflicto?. Esta vez quizás precedido por un mega-atentado terrorista que revindique para los iraníes su categoría de Enemigos Públicos.Como se ve la cosa no pinta para festejos, son conjeturas, lo que si no tengo duda es en cuanto a que se han quedado sin margen de maniobra en lo político y militar, y honestamente no se si eso es malo o peor.
Vayamos por partes ¿cuáles son las cosillas que hacen ruido? Por primera vez, guerra de Irak incluida, la imagen interna de Bush ha entrado en caída libre, la externa hace rato que no existe. Los hábitos económicos de los norteamericanos, que han ido evolucionando en los últimos años por un consumismo desenfrenado y un endeudamiento desmedido están al filo de una debacle sin precedentes, porque los va a tocar a todos, en sus bolsillos, en sus propiedades, en realidad propiedades de los bancos y financieras. Hasta sus puestos de trabajo pueden colapsar. Hasta el viejo recurso de hacerle pagar al mundo su déficit fiscal se les va a complicar. El gran gigante asiático que comenzó lentamente a desperezarse ahora reclama lugar, quiere comprar las tecnológicas, las petroleras, automotrices etc. Son dueños de casi todos los papelitos de la deuda y lo que es más serio, a los chinos no se los puede apretar, sus tiempos y sus urgencias no son las de occidente. Hasta en Europa se les dio vuelta la taba. En Le Burget, el Airbus europeo duplicó las ventas de Boeing y no es un dato de un negocito menor.
En las elecciones de Irán, que antes de realizarse calificaron de fraudulentas y una vez instalado el nuevo presidente lo proclamaron como el “nuevo enemigo Nº1 de la democracia y la libertad” volvieron a mostrar la hilacha. Brillante la sutileza, no es el enemigo de ellos, es el enemigo de todos los pueblos libres y democráticos. ¿Estarán pensando el viejo recurso de armar un conflicto?. Esta vez quizás precedido por un mega-atentado terrorista que revindique para los iraníes su categoría de Enemigos Públicos.Como se ve la cosa no pinta para festejos, son conjeturas, lo que si no tengo duda es en cuanto a que se han quedado sin margen de maniobra en lo político y militar, y honestamente no se si eso es malo o peor.
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