Vienen las fiestas, verano y vacaciones, un buen libro es el
compañero obligado.
Historia, diálogos, reflexiones, mirar el mundo con ojos
gastados de novedades para comprobar que todo ya se hizo y no se lo ve porque
fracasó.
En esta recomendación de hoy hay un precedente tratado
anteriormente: el Alejandro I y II de Gisbert Haefes; esta vez es otra opinión visto con distintos cristales, sin que haya
contradicción, la historia es una, se la ve de distintos ángulos; en este caso
relatado por boca de Ptolomeo hijo de Lago y cabeza de los lágidas que en
Egipto gobernaron hasta Cesarión el hijo de Cleopatra y Cayo Julio Cesar casi
un milenio después ¡Vaya tiempo y que corrió agua bajo el puente!
De aquellos polvos vienen estos barros, no puede comprenderse
una cosa sin conocer la otra.
Su autor para mayor sorpresa es un Ingles que piensa y
escribe con gran solvencia con mente griega y del cercano oriente, que siguen
siendo el ombligo del mundo
Época en que simposios con invitados brillantes reemplazaban
a los panelistas y charlatanes de los telediarios y matanzas sin complejos
sensibleros: es el deber y punto.
Si usted junta en un libro, macedonios, cartagineses, las
tribus del desierto y los miles del cercano oriente, sus hojas chorrean sangre
y me consta que no parece recomendable en esta época tal literatura.
Por ello valga una aclaración: la muerte es el obligado y
necesario fin de la vida, no le duele al muerto sino a los vivos que quedan, un
día resucitaran todos; a lo que hay que temer es a los que matan el espíritu y
paradójicamente nos desarman contra ellos con el remanido argumento del diálogo
y la tolerancia.
Persas, demócratas, republicanos, cínicos, hipócritas o
exhibicionistas; nada distinto de aquellas personas con las que se cruza,
saluda, conversa y hace negocios cada
día o le regalan desinteresadamente la “data” precisa de lo que pasa y pasará.
Si le digo que vale la pena
tenerlos, leerlos, releerlos o regalarlos vale, tienen una garantía de
más de dos milenios.
ALEJANDRO MAGNO I Y II, Gisbert Haefs, Alfaguara, Taurus
2006.
EL DIOS DE LA
GUERRA, Cristian Cameron, BsAs,ediciones B 2013
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