Utilizar vocablos vacíos es como construir en la arena o querer darle forma al viento, utopías que amenazan al siglo de la comunicación.
En todas partes se utilizan vocablos vaciados de significado durante años por una sistemática acción de guerra psicológica y rellenos de ideología o sentimientos.
La paz es buena, la guerra y la confrontación malas, el dialogo es bueno y necesario, la unidad nacional un objetivo obligado.
Poco importa como se obtiene la Paz, si matando al contrario o reduciéndolo a la nada,
Todos parecen competir saturando con mensajes de significado confuso.
Acabamos de oír que la delirante que nos gobierna afirma que la unidad nacional es solo para hacer lo que ella dice.
Llaman al diálogo los especialistas en el monólogo: votar leyes a libro cerrado o impedir sesiones y debates utilizando el quórum.
¿Si no puede haber diálogo cuando se piensa y habla en distintos idiomas o sobre cuestiones que no existen: inseguridad, corrupción, inflación, robo a jubilados, justicia en mano de delincuentes de que sirve el diálogo, dialogo y más diálogo para solucionar conflictos?
Ahora el mundo está más tranquilo dijo otro megalómano después de asesinar a Bin Laden, de la misma manera que Roma buscó la paz bajo el peso de sus legiones no hace mucho se busco la paz y terminar con la guerra reduciendo a polvo radioactivo a Hiroshima y Nagasaki.
¿Son concientes los que hablan, de las enormidades que esconden sus términos vacuos?
Son simples consigan en busca de implantar un pensamiento único, hoy la guerra es por el control del pensamiento de las masas.
Asegurado este, caen como tejo naciones, territorios, creencia y tradiciones.
Unidad Nacional solo para hacer lo que yo creo y quiero
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