El tufo llegó antes que el año y hoy ya es insoportable. No me refiero a este o aquella en particular ni a todos en general, describo un hecho que me sorprende, no lo registraban 70 tacos de existencia en este mundo.
Se que no se le desea la muerte a nadie, es más pido por ellos, sabiendo que la eternidad nunca acaba y no hay marcha atrás.
Tampoco voy a caer en el despropósito de incurrir en un delito imposible como matar a un muerto.
Los cuerpos que hieden se están pudriendo ya no están vivos.
Enterrarlos y a otra cosa es la antigua sana costumbre.
Fantasmas y almas en pena solo pueden molestar en un mundo de vivos.
Pocas cosas deben resultar tan tragicómicas como los desvelos de los que están acabados por reelecciones eternas.
Que si, que no, que si habla hace ejercicios o depende de un enchufe.
El problema no es del que pide pista es de los que se quedan y tienen que atornillarse a una tierra movediza.
Dije bien: este 2013 apesta, hay dos en el caribe, una en la otra punta de América más los tapados de siempre y alguno que viene patinando feo.
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